miércoles, 29 de febrero de 2012

LA HISTORIA SECRETA DE LADY SARAH



Sarah de Laighin, futura Lady Balehead of Haverfordwest, fue dueña de una de las bellezas más comentadas de su tiempo. Los cantares de trovadores que viajaban a través del Mar del Iwerd se hicieron eco del brillo inolvidable de sus rizos dorados, de la brevedad de su pie, de su clara risa y nívea piel. Ella, empero, jamás fue consciente de esa belleza tan aclamada y pasó sus días en la más feliz ignorancia sobre los efectos enloquecedores que causaba su presencia en los corazones varoniles. Se llegó a decir incluso que tales trastornos eran provocados por potentes narcóticos que ella misma preparaba y gustaba de servir en la bebida a los caballeros por el sólo placer de verles perder la razón tras el eco de sus pasos. Sin embargo, quien tal osó decir es que jamás la conoció. De verla un instante se hubiese convencido de lo desacertado de tales afirmaciones. Sarah de Laighin era tan hermosa que cortaba la respiración.    

No fue, no obstante, su belleza lo que hizo su mano tan solicitada. Al igual que sus otras hermanas, el motivo de su casamiento fue eminentemente político y Lord Balehead, a pesar de su fama de hombre rudo y poco comunicativo, era el mejor de los partidos posibles al otro lado de un mar que había sido escenario de cruentas batallas y que, en aquel entonces, era una vía de comercio insustituíble. Cuando  Sarah de Laighin lo cruzó, con rumbo a su destino matrimonial, no había en su mente ni un atisbo de esperanza de encontrar el amor. Tampoco lo precisaba. Pues Sarah de Laighin ya estaba enamorada desde el primer instante en que tuvo uso de razón.  
Entre el séquito que viajaba con ella hacia Gales iba un muchacho de mirada limpia y risa contagiosa. Su nombre era Hugo de Clare, hijo natural de uno de los hermanos de la madre de Sarah. Ambos habían crecido a la par, y Sarah había conocido el mundo a través de los ojos de Hugo. Tan unidos estaban que sufrían con las mismas pesadillas y no usaban palabras para hablarse. 
Con la ceguera de quien no quiere ver lo que no le conviene, nadie había reparado jamás en tales sentimientos. A fuerza de verles siempre juntos montando a caballo, jugando en los patios, bañándose en el mar, corriendo por colinas y acantilados, todo el mundo llegó a tomarles por hermanos y como tales cualquier sospecha de imprudencia en su conducta estaba fuera de lugar.  


  
Así, lo natural y conveniente era que Hugo acompañase a Sarah en la travesía y en su nueva vida de casada. Y ambos lo aceptaron intentando ocultar la sonrisa de satisfacción que la ceguera familiar les provocaba. Nada había de cambiar para ellos. Eran conscientes con su poca edad de que estaban indisolublemente unidos hasta el fin de los tiempos, y un marido desconocido constituía escaso peligro para un amor que ellos sabían condenado a no extinguirse jamás. 

En honor a la verdad, tuvieron razón en sus osadas aspiraciones. Pues, Lord Balehead jamás constituyó un problema. Nunca fue un hombre celoso de lo que sabía que no había de poseer. Él veía a su esposa como una ventajosa transacción que había de reportarle descendientes a su sangre. El resto le tenía sin cuidado. A qué o a quién dedicaba su esposa sus querencias era cuestión que simplemente no le incumbía. Sin embargo, el peligro para los enamorados existía. Y los celos enloquecidos iban a provenir de alguien totalmente inesperado. Y con fatales consecuencias.

3 comentarios:

  1. ¡Oooh, ha sido un placer descubrir la historia secreta de lady Sarah, así como lo desafortunado de sus afectos velados sin duda por una sencilla "transacción"!

    Excelente narración la suya, lady, me encanta cómo nos ha mostrado la belleza de lady Sarah reforzada por la "brevedad de su pie".

    Un saludo cordial.

    ResponderEliminar
  2. No podía usted haber elegido mejor imagen que la de Tristán e Isolda para ilustrar el texto, madame. La pobre Sarah hubo de vivir un amor a escondidas, y eso, tarde o temprano, lleva a la imprudencia. Me pregunto si sería así en este caso.

    Veo que ya conoce usted a mi querida Lady Akasha :)

    Feliz día

    Bisous

    ResponderEliminar
  3. Hola, llegue desde el blog de Madame Masquee y me enganche con la historia que esta narrando. Va muy bien siguiendo el sol. Esperamos el proximo capitulo.

    ResponderEliminar